Cantera gana a cantera
Por Rubén López | ruben@futbolconpropiedad.com
Ayer se enfrentaban dos equipos con política parecida. Ambos clubes se fijan mucho en los jóvenes para darles la oportunidad en el primer equipo cuando estiman que pueden dar buen nivel. Bien es cierto que los de Wenger tienen por costumbre fichar a los jugadores a edad temprana, pero con una formación avanzada (sobre los 18 años), caso de gente como Denílson, Diaby, Ramsey, Song... mientras que los de Guardiola apuestan más (por lo general) por la formación total, buscando a los jugadores con edades más tempranas para empaparlos completamente en la política del club.
El enfrentamiento entre estas dos fórmulas similares pero diferentes dio mucho que hablar en las fechas previas. Se decía (y yo también llegué a pensarlo) que el juego de los gunners, que es en condiciones normales de un estilo parecido al del Barça, podría hacer mucho daño a los de Guardiola al darles de su propia medicina, pero resultó ser una conclusión equivocada. Unos minutos tontos del Barcelona en la ida hicieron pensar que el Arsenal era capaz de la gesta de eliminar al mejor equipo que pisó nunca un campo de fútbol (o eso dicen, y yo me lo creo).
La dura realidad se vio clara en la vuelta en el Camp Nou. Un avasallamiento total del Barça, que logró unas estadísticas que meten miedo y un juego del Arsenal basado en encerrarse y esperar que la intervención divina jugara su papel, unido a un querer y no poder absoluto del equipo londinense en los últimos minutos hicieron que el resultado final fuese un 3-1 y gracias.
Se podrían buscar excusas, que si la expulsión de Van Persie condicionó el partido (que sí, que fue inventada e influyó en cuanto el Arsenal se vio obligado a atacar no se puede negar) que si Cesc no quería hacer daño al Barça (acusación muy grave a la profesionalidad de un futbolista que prefiero evitar pensar) o que si las condiciones climatológicas no eran las propicias debido a una humedad en el ambiente que desconcertó a los jugadores de Wenger. Yo, sinceramente, prefiero quedarme con que estamos ante el mejor equipo del mundo, y disfrutar de su juego aunque no sea culé, igual que disfruté con el Brasil del 2002, con el Manchester del triplete o con el Milán de Sacchi (aunque tuviera que conformarme con ver a estos últimos en diferido).
El enfrentamiento entre estas dos fórmulas similares pero diferentes dio mucho que hablar en las fechas previas. Se decía (y yo también llegué a pensarlo) que el juego de los gunners, que es en condiciones normales de un estilo parecido al del Barça, podría hacer mucho daño a los de Guardiola al darles de su propia medicina, pero resultó ser una conclusión equivocada. Unos minutos tontos del Barcelona en la ida hicieron pensar que el Arsenal era capaz de la gesta de eliminar al mejor equipo que pisó nunca un campo de fútbol (o eso dicen, y yo me lo creo).
La dura realidad se vio clara en la vuelta en el Camp Nou. Un avasallamiento total del Barça, que logró unas estadísticas que meten miedo y un juego del Arsenal basado en encerrarse y esperar que la intervención divina jugara su papel, unido a un querer y no poder absoluto del equipo londinense en los últimos minutos hicieron que el resultado final fuese un 3-1 y gracias.
Se podrían buscar excusas, que si la expulsión de Van Persie condicionó el partido (que sí, que fue inventada e influyó en cuanto el Arsenal se vio obligado a atacar no se puede negar) que si Cesc no quería hacer daño al Barça (acusación muy grave a la profesionalidad de un futbolista que prefiero evitar pensar) o que si las condiciones climatológicas no eran las propicias debido a una humedad en el ambiente que desconcertó a los jugadores de Wenger. Yo, sinceramente, prefiero quedarme con que estamos ante el mejor equipo del mundo, y disfrutar de su juego aunque no sea culé, igual que disfruté con el Brasil del 2002, con el Manchester del triplete o con el Milán de Sacchi (aunque tuviera que conformarme con ver a estos últimos en diferido).
Pienso que la expulsión fue muy rigurosa, pero para nada inventada. Es tarjeta amarilla si un jugador desplaza el balón después de haber pitado el árbitro, si se le suma a la amarilla anterior (que yo creo que fue agresión a Alves y debió ser roja) tenemos la expulsión. No se expulsó por desplazar el balón, que es la falacia que todo el mundo comete, se expulsó por doble amarilla.
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ResponderEliminarKaos, puede que cogiendo el reglamento y alicandolo rigurosísimamente eso pudiera ser motivo de sacarle la tarjeta que provocase la expulsión, pero en la práctica no la veo muy justificada, acabarían todos los artidos mínimo 4 amonestados por esa razón. De todas formas todos tenemos un entrenador y un árbitro dentro.
ResponderEliminarY Anónimo, a insultar a tu casa, aquí defendemos la libertad de expresión, pero si no sabes usarla y atentas contra la de otros no me da ninguna pena borrar tu comentario.
Sí, por eso ante todo digo que es muy rigurosa la expulsión porque de por sí es rigurosa la amarilla. Lo que denuncio es la falacia, parece que fue expulsado por ello cuando eso fue resultado de la segunda amarilla forzada por esa acción, ahí reside la diferencia que en todos los medios de comunicación tapan y que es una falacia. De todas formas también veo injusto que eso eclipse un gran partido, las estadísticas las sabía por encima pero ver 800 pases en un partido es brutal.
ResponderEliminarLo más increíble de los pases es que a parte de ser semejante cantidad, el porcentaje de acierto es del 84% y el Arsenal, con 199, sólo un 59% de completados. Luego ya está el tema de la posesión y los disparos. Tremendo
ResponderEliminarCon el reglamento en la mano no es amarilla. Si lees el reglamento lo que se castiga es la realización de esa acción con motivo de pérdida de tiempo. Y en este caso en concreto se puede observar clarísimamente que no existe esta intención para nada, sino que termina la jugada intentando marcar gol sin saber que fué anulada previamente.
ResponderEliminarPor eso digo, si se aplica rigurosísimamente y sin perdonar que sea de una forma no voluntaria (en apariencia por lo menos) podría sacarse amarilla. Pero yo no creo que fuese para expulsar a un jugador en un momento tan importante
ResponderEliminarPara mi sí intenta perder tiempo,y es amarilla.¿Lo hubiera echado?No ¿si fuera gunner me cabreo con Van Persie? Mucho ¿tiene motivos el Arsenal de protestar?Mejor que callen y mucho,pues se puede recordar no sólo el clarísimo penalti de ayer,sino también el gol anulado-penalti que se traga en la ida,o las noventa faltas que hizo Song.Quería que en caso de no pasar Barça el Arsenal ganara,pero no el que vi ayer.Dio una imagen deplorable,y la decepción es enorme.Atacar a Cesc no merece ni comentario,como tampoco lo merece algunos titulares que he leido acerca de que le pitaron.Cesc se merece jugar en el Barça,pero me temo que esta eliminatoria aún pone las cosas más díficiles(por Wenger y no por él).Gano el equipo que merecio y quiso ganar.Me quedo con el mejor futbolista que he visto nunca,me quedo con Mascherano(para esta clase de partidos se le ficho),me quedo con Koscielny(el mejor gunner de esta eliminatoria de largo),y con Iniesta,que ayer marco diferencias.
ResponderEliminarUn saludo
Sí, preobablemente el Barça tiene más par quejars en el global de la eliminatoria. Mascherano se salió, igual que iniesta, pero Koscielny, aunque es un gran central, tien fallos increíbles a veces, y tuvo algunos el otro día.
ResponderEliminarSólo hay una verdad: el Barcelona merecía pasar. Más allá de árbitros, de tarjetas, de penaltis... está el juego del FC Barcelona, que es el mejor del mundo, y eso es algo casi incuestionable.
ResponderEliminarApuesto por ellos para ganar la Champions, aunque si siguen fallando tanto igual caen. Pero por juego, no hay color. Está claro.