Disparando al pianista.
Por Rubén López | ruben@futbolconpropiedad.com
Durante los tiempos dorados del western de Hollywood se hizo muy típico en las escenas de saloon el utilizar una frase que se convirtió más tarde en cliché: en las paredes de algunos de los decorados cinematográficos que representaban aquellos emblemáticos locales norteamericanos del siglo XIX se podía leer un cartel con la leyenda 'Por favor, no disparen al pianista'. Eran tiempos arriesgados, en los que una ingesta mal asimilada de Old Overholt podía resultar fatal para los que rodeaban al armado consumidor de alcohol. Y por supuesto, el hombre que tocaba el piano para amenizar la estancia era un blanco muy apetecible, sobre todo cuando su habilidad no era sobrada.
Claro está que en esta vida la fortaleza pesa, por sí misma, más que el talento, y destaca más alguien que llega entrando con una patada en la puerta (el borracho que viene a buscar pelea) que el que ya estaba dentro sin hacer ruido pero aportando la única pizca de magia en la sala. En el Real Madrid, durante estos días, ocurre una analogía interesante con esta situación, y parece que hoy, último antes del cierre de mercado, va a ser uno de los temas destacados.
No es que Bale llegase borracho (o al menos no me consta), pero sí que apareció reventando la puerta con fuerza hasta el punto de no dejar ni el marco. Y mientras, dentro del bar, un hombre sin la personalidad necesaria ni siquiera para dar un golpe sobre la mesa delante de todos espera con mala cara, mientras el recién llegado hace que la gente se fije en él y lo miren con curiosidad, esperando a ver lo que hará y por qué apareció allí con esos aires.
Özil, este músico improvisado para la causa, se mueve donde a Bale le cuesta, cuando no hay espacios, y después de desembarazarse de los rivales crea dichos espacios para sus compañeros, algo muy necesario tanto para el galés como para Cristiano. Diría que sería un futbolista clave en el estilo de juego que pretende crear Ancelotti, aunque la figura de Isco le arrolló. Para la Liga, Özil puede ser más determinante que Bale en muchos partidos por la mayor necesidad de buscar y gestionar espacios, pero sí es cierto que en Europa el ex del Tottenham puede hacer más daño en partidos grandes, y es una competición que en el Bernabeu pesa más que ninguna. Sería interesante ver lo que podrían conseguir jugando juntos, aprovechándose cada uno de las virtudes del otro. No obstante, no lo veremos.
Por supuesto, también está el dato de que la oferta se dice que ronda los 50 millones y es una cantidad considerable teniendo en cuenta que supera en mucho a los 18 por los que llegó a España. Pero la raíz del asunto es que es una oferta hecha porque desde hace tiempo se llevan haciendo amagos de poenerle en el mercado. Siempre me desesperó su tendencia a desaparecer, pero su nivel en los partidos en los que está fino es de la máxima élite. Quien sabe, es posible que el cambio de cromos les acabe dando su ansiada décima, pero lo harán sin piano sonando de fondo. A partir de ahora sonará una furiosa orquesta y comenzaran a cabalgar las valkirias: Valhalla espera.
Cuando Ozil está fino , el Madrid lo nota y mucho . la pena , es que la llegada de Isco parece haberle superado . saldrá en el cierre del mercado?
ResponderEliminarUn saludo